jueves, 1 de abril de 2010

...y por cierto me encanta,¿a ti no?



Madre mía que filete...
Puede que te guste la carne poco hecha, pero de eso a que deje un rastro de sangre en el plato…

Pues nada, no hay que preocuparse, porque… no es sangre.

La sangre circula por las venas y arterias de los animales vivos. Una vez en el matadero, la sangre se extrae del cuerpo del animal, excepto la que queda atrapada en el corazón y los pulmones. Así que no llega al plato.

El filete es tejido muscular, no una parte del sistema circulatorio. El color rojo de los músculos es consecuencia de la mioglobina, una proteína que almacena oxígeno en los músculos para ser utilizado cuando se requiera energía de manera repentina, o sea, que no es sangre. La mioglobina y la hemoglobina de la sangre son ambas de color rojo, debido al hierro que contienen. Por eso la confusión.

El hecho de que los animales tienen diferentes necesidades en cuanto a la obtención de energía, explica por qué sus músculos no contienen la misma cantidad de mioglobina y, por eso, el color de su carne.

La carne de ternera es más roja que la de cerdo y ésta más roja que la de pollo. Y la de los peces es mucho más blanca por el mismo motivo.